El aumento de peso y el lugar de trabajo hábitos alimenticios

Recientemente, un estudio de investigación se llevó a cabo en el problema de la obesidad que surgen en los Estados Unidos. Los resultados señalaron la previsibilidad de las endémicas. En el Instituto de Santa Bárbara de Medical Nutrition y peso saludable, el Dr. John La Puma, junto con sus colegas estudiaron los datos auto-reportados de más de 390 médicos que ejercen sobre sus hábitos de consumo.
Un aspecto general del estudio analizó la correlación entre el estrés relacionado con el interno se unieron con el estrés profesional en el lugar de trabajo. Ambos tipos de factores de estrés fueron previstos en los profesionales médicos que tenían sobrepeso y fueron representados en el cálculo de su índice de masa corporal o IMC (p =. 001).

Otros denominadores comunes fueron la propensión al consumo de alimentos durante los sentimientos de soledad o una manera de hacer la comida del soborno o recompensa. Además, los médicos que consumieron alimentos de la cafetería del hospital, o solicitarse eran más propensos a tener sobrepeso que los médicos que llevaron a su almuerzo.

Para la gran mayoría de los médicos el estrés es sólo un elemento más del trabajo. Puesto que el trabajo que muchos médicos en ambientes donde la comida está en todas partes en el lugar de trabajo, es fácil para los médicos a caer en la trampa de comer en exceso. El hallazgo del estudio de investigación mostró una relación con el peso en los médicos que llevaron su almuerzo al trabajo.

Las evaluaciones de los hábitos de consumo tomó la raza, el sexo y la edad como otras áreas de revisión. Sólo ocho por ciento eran obesos, y otros cuarenta y cuatro por ciento de los médicos tenían sobrepeso. En general, los médicos de sexo masculino que estaban sobre la edad de 46 años tenían el doble de probabilidades de ser hombre. Más del 25 por ciento eran mujeres y el 50 por ciento.

La conclusión del estudio se determinó que desde que los médicos son más propensos a más de entregarse con los alimentos, la gestión del estrés podría ser una buena táctica para eludir la tentación de derrochar.